Nos acercamos a los 50 días de
paralización de todo el movimiento de expedientes, audiencias y sentencias en
el Poder Judicial, al haber llegado a un punto muer to de las negociaciones, de
donde no se puede dar paso ni para atrás y menos para adelante.
En opinión del ex-premier Juan Jiménez Mayor:
«... con una paralización de los
procesos que afectan a los justiciables y abogados. La pretensión de la huelga
desde mi punto de vista es cuestionable pues se plantea que el Congreso emita
una ley que excluya a los servidores de la Ley del Servicio Civil, lo que luego
ha sido fundamentado por algunos señalando que la aplicación de dicha ley es
lesiva de la Constitución. No hay asidero para tal argumento, pues el régimen
laboral de los trabajadores públicos es –o debiera ser- uno solo, salvo las
particularidades de algunas ramas como la PNP, FFAA, Servicio Diplomático,
médicos e incluso jueces (que tienen leyes de carrera especial). En el caso de
los servidores judiciales, tanto los adscritos a la función judicial como los
que conforman el servicio administrativo del Poder Judicial, hoy día se
encuentran regulados por la normativa ordinaria (Decretos Legislativos 276 y
728, así como el régimen CAS) y pueden perfectamente permanecer ahí o en la
nueva Ley del Servicio Civil».
Esto es
lo que dice un vocero del Gobierno; pero
lo que sostienen los trabajadores en huelga es todo lo contrario; de ahí
la persistencia en mantener su medida de lucha.
Conversamos
esta semana con el dirigente NESTOR MENDOZA de Jaén. Dijo que se mantenían muy
unidos en su lucha, a nivel nacional, que, después de haber implementado OLLAS
COMUNES en el frontis de sus centros de trabajo, «esta semana se radicalizará
la huelga», anunciando que «si hasta hoy se venían atendiendo a reos en cárcel,
a partir de esta semana la paralización será total».
Lo que
quiere decir que nadie asistirá, ni siquiera por emergencias a ciertas
diligencias que suelen ser de mucho rigor y urgencias graves.
Paralelo a este panorama muy crítico, habría
que ver la indiferencia de los abogados,
principalmente EN JAEN y a nivel nacional;
que, pese a ser muy afectados con esta
paralización, parecería que no les importa la situación laboral de
quienes son sus «puntales» inmediatos en su trabajo. Nadie hasta hoy, ha
emitido siquiera un pronunciamiento de apoyo a los trabaja dores en huelga, lo
que evidencia la desidia, indiferencia y mediocridad como un claro mensaje que
estos profesionales, no sirven ni para defenderse a ellos mismos.
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