Todo el cuerpo lo está también y esto es lo que peligrosamente se viene observando en nuestro gobierno local. Ha llegado en apenas un año a extremos poco concebibles, como por ejemplo, no ejecutar más del 80% de los acuerdos de las sesiones de Concejo. Cuando esto sale a la opinión pública, habría que preguntarse lo que están pensando quienes eligieron a los gobernantes locales. Como lo remarcamos en ediciones anteriores: sesiones y más sesiones, si recurrimos a las cifras en 17 meses por cuatro sesiones al mes, libre de las extrardinarias que suman otro tanto, dietas para los sesionantes, mínimo 20 mil soles mensuales; viajes y comisiones, etc., para que de todo eso SOLAMENTE SE HAYA TOMADO EN CUENTA un miserable 80%???
¡No puede ser!!!!
Que, al ritmo que vamos, corremos el riesgo que esta gestión concluya como lo que estamos viendo: PURO DISCURSOS, POSES, INICIATIVAS AL VIENTO, para tapar lo que está yendo por dentro que el pueblo no es tonto ni ciego y lo palpa cotidianamente. Ni siquiera pueden controlar las discotecas ilegales, no se ha podido corregir la laguna que se forma en la cuadra tres de la calle Manco Cápac que cuando llueve se convierte en criadero de larvas y barro podrido. Mucho menos poner freno a un empresario de agregados para construcción que se apoderó de la vía pública en la tercera etapa de Fila Alta, simples botones de muestra que pintan de cuerpo entero la censurable conducción de esta nueva gestión del señor Prieto Maitre, sin mencionar lo que se viene gestando en estos días que será el estallido del polvorín que podría tener muchos efectos, laterales y colaterales.
Nororientalmente: EL DIRECTOR.
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