Juliana Oxenford - Periodista
Qué miedo ser mujer en un país donde no valemos ni mierda. Donde nos juzgan constantemente, donde tenemos que demostrar a cada rato que- ademas de nuestra condición de simple “hembras” - también somos inteligentes, donde no se nos perdona nada...ni la vida. Qué miedo ser mujer y peor aún ser mamá. Ahora son nuestras hijas las que sufren las consecuencias de esta sociedad enferma e indolente, son ellas las que están pagando los platos rotos de un mundo donde se nos ha ido restando valor a tal punto que toman a nuestras niñas, las secuestran, violan y matan.
La lucha dignifica, es cierto. Pero hasta cuando tenemos que salir a las calles a gritar “Ni una menos”? Hasta cuándo suplicaremos por nuestro derecho a respirar tranquilas? Hasta cuándo?.
Hoy me levanté con ganas de vestir a María de hombre por temor a que le hagan algo. Hoy tengo pánico de salir a la calle y no volver a casa. Hoy más que nunca lloro por ser mujer y por lo poco que puedo hacer por proteger a mi hija.
No somos un pedazo de excremento que puedes pisar, tirar a la basura y simplemente limpiarte los zapatos para no dejar huella. No lo somos.
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