Miramos desde fuera, desde el ruedo o las tribunas desde donde se aprecian mejor las jugadas, refiriéndonos al proyecto de DEMARCACION TERRITORIAL que desde hace un tiempo viene impulsando un autoproclamado «lider» wampis, don WRAIS PERES que de paso ni siquiera es de Condorcanqui si no de Loreto, que no tiene oficio, profesión u ocupación conocida y de otro lado un FRANCISCO SHAJIAN en las mismas condiciones con apoyo de algunos dirigentes de AIDESEP como don EDWIN MONTENEGRO sacha awajun y de muy negativos antecedentes que se registran aquí en estas páginas.
No dudamos que sus intenciones pueden ser positivas; pero lo que nos preocupa es la conciencia ancestral cosmovisionaria de los pobladores de ambas etnias que como es bien sabido, estuvieron enfrentados en guerras fratricidas por más de un siglo y recién se tranquilizaron a mediados del siglo pasado (1950) cuando hicieron retroceder a los huambisas hasta GALILEA y unos dos a tres kilómetros abajo de este puerto se estableció el bastión aguaruna con el poblado YUTUPIS o Yutupisa.
Estos hechos históricos han dejado muchas cicatrices en viejos pobladores de ambas etnias. El autor de la presente las pudo palpar en una de sus primeras visitas a Río Santiago, agosto de 1975, cuando se podía apreciar con claridad los resquemores entre pobladores aguarunas y huambisas, era riesgoso que ambos estén en una fiesta, porque salían peleando. De allí que los líderes actuales deberían tener mucho cuidado en este proyecto de linderamiento o demarcación territorial de estas etnias. No todos están preparados para entenderlo y de retroceder a los tiempos pasados los únicos responsables serían los que hoy están impulsando este raro proyecto.
Nororientalmente: EL DIRECTOR.
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