De nuevo estamos con más de lo mismo en otra campaña electoral en el marco de una legislación obsoleta, destartalada y acomodada a gusto y antojo de los vividores de la política a costa de los ingenuos e ignorantes que les gusta formar rebaños para seguir a tanto embustero que le gusta la vida fácil.
Escuchar otra vez alucinantes promesas y por si fuera poco, volveremos a verlos como predicadores de sectas satánicas utilizando sus mejores poses y disfraces, los varones, las mujeres candidatas, sus mejores maquillajes, sonrisas y coqueteos, que desde luego, es muy natural en cuestiones de marketing exhibir lo mejor del producto que se está vendiendo; pero lo que siempre nos pareció indignante es ver de cómo estos jijunas utilizan desalmadamente a pequeños para exhibirse como paternales candidatos, cuando en sus hogares ni se reúnen con sus hijos, ni los atienden. No obstante existir abundante legislación para proteger a los menores, éstos se zurran en las leyes, con tal de hacer creer que son «buenas gentes», aprovechan la ingenuidad de los padres y cogen a sus hijos para exhibirse, en una actitud condenable y criminal que las autoridades, MINISTERIO PUBLICO - DEFENSORIAS DEL PUEBLO y tantos otros se hacen los ciegos o los cojudos para no percatarse.
De todo lo cual siempre estaremos vigilantes para no permitir más abusos y luchar para que se respete a nuestros niños y no sean utilizados por estos avivatos.
Salvo mejor parecer,
Nororientalmente EL DIRECTOR.
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