Esto era lo que decía, según publicación del diario AHOA-JAEN, cuando afrontaba las primeras denuncias. Claro, se sometía «a toda investigación en la Fiscalía» de su amigazo fiscal que lo encubría MOGOLLÓN CASTILLO; ahora que ya no es alcalde ni alcanzó espacio en la telaraña política, le vino una de las tantas sentencias que tiene en camino, él y sus secuaces EDWIN LLIQUE VENTURA, WINCLER DELGADO MONTEZA y otros de su entorno que están siendo procesados.
Tras la sentencia que los condena a CUATRO AÑOS OCHO MESES DE PRISION EFECTIVA, está moviendo todas sus influencias y recursos (plata mal adquirida). Su compinche adjunto entró a pie a la alcaldía y al poco tiempo ya se paseaba en carrazos, típica del pobretón que nunca tuvo ni bicicleta. Pero no hay crimen perfecto. Ananías cambió de mujer ganándose juicio por alimentos, perjuró a los preceptos de su iglesia, tan similar a los que le está sucediendo a su lidereza Fujimori Higuchi y ahora le viene lo que le espera a todos los que delinquen.
Idem Llique Ventura y mucho peor, su cómplice principal WINCLER DELGADO, cuyos rastros se han perdido, es decir, creen que están bien ocultos; pero JAEN es pueblo chico y aquí todo se sabe y si usted estornuda en Fila Alta, ya lo escucharon en Magllanal. De modo que estos delincuentes lo único que están haciendo es prolongar su agonía.
Jueces honestos como el que lo condenó, son de la promoción de CONCEPCIÓN CAR HUANCHO y DOMINGO PEREZ. Tenemos la plena certeza que les caerá todo el peso de la justica. Esta vez ya no habrán jueces descarados que se vendan con los hábeas corpus, como lo hicieron en sus tiempos de gobernante local.
Los jaeneses deben permanecer alertas y no bien los ubiquen avisar a la policía para que sean capturados.
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