De los cinco magistrados que componen el pleno del Jurado Nacional
Electoral, en votación habían quedado dos a dos, en favor y en contra de la
vacancia del cuestionado teniente alcalde de la MPJ Edwin Never Llique Ventura,
por lo que fue necesaria la intervención
del Presidente del Jurado Dr. Francisco
Távara Córdova, quien, curiosamente, se inclinó en términos resumidos, POR LA
PERMANENCIA del cuestionado regidor
ahora alcalde. Extrañamente su voto dirimente inclinó la balanza a favor de
Llique.
La
sospecha radica en que, habiéndose puesto este individuo al servicio del
fujimorismo, que en esa «ala» tiene mucho que ver el dueño de las universidades
ALAS PERUANAS, FIDEL RAMIREZ, muy
cercano pariente y mecenas del congresista JOAQUIN RAMIREZ GAMARRA, de en
cierta ocasión se produjo un rumor con muchas publicaciones periodísticas por
un viaje que le solventaron a Europa al hoy presidente del JNE, no deja de motivar algunas sospechas de
posibles jugadas de alto y muy secreto
nivel por el acercamiento con el referido congresista y por lo que también
denunció el vacado ex-alcalde, para que se le «perdone» la vacancia, puesto que
el mismo Llique votó por su vacancia
reconociendo su error o delito, y ahora
sale tácitamente «perdonado» y como se le ve, su servilismo al fujimorismo gamarrista, es inocultable.
Indudablemente se quedará hasta fin de año, toda vez que la resolución
emitida en su artículo primero
Declara NULO el Acuerdo de Concejo N.° 077-2014-CPJ/SE, de fecha 21 de
enero de 2014, adoptado en la sesión de concejo extraordinaria, llevada a cabo
el 16 de enero de 2014, que declaró la vacancia de Néver Edwin Llique Ventura,
regidor de la Municipalidad Provincial de Jaén, departamento de Cajamarca, por
las causales previstas en los artículos 11, segundo párrafo, y 22, numeral 9,
concordante este último con el artículo 63, de la Ley N.° 27972, Ley Orgánica
de Municipalidades. En su Artículo
segundo.- resuelve DEVOLVER
los actuados al Concejo Provincial de Jaén, departamento de Cajamarca, a
efectos de que en el plazo máximo de treinta días hábiles vuelva a emitir
pronunciamiento sobre el pedido de declaratoria de vacancia presentado en
contra de Néver Edwin Llique Ventura, autoridad edil de la referida comuna,
debiendo proceder de conformidad con lo expuesto en la presente resolución,
bajo apercibimiento, en caso de incumplimiento, de remitir copias de los
actuados al presidente de la Junta de Fiscales Superiores del distrito fiscal
que corresponda, para que, a su vez, este las remita al fiscal provincial penal
respectivo, a fin de que evalúe conforme a sus atribuciones la conducta de los
integrantes del citado concejo municipal.
Imagínense, 30 días hábiles más, los que al paso que se tramitan los documentos en las oficinas del JNE, implicarían otros 30
días más y hablamos ya de setiembre, que se vuelva a pronunciar el Concejo y
ese pronunciamiento sea elevado otra vez al JNE, 30 días más y estamos
finalizando octubre, 30 días más para que resuelvan, llegamos a diciembre.
Así de
elegante la jugada, con la que nos pasaron por las verijas a los jaeneses y
aquí le tomamos las declaraciones recientes a Llique, cuando adelantó que «no
lo vacarían». Sabía porqué lo decía.
Claro, no le pidieron 400 mil como al otro, pero casi nadie sabrá las
verdaderas razones por las que el JNE dejó a otro corrupto en el gobierno local
de nuestra provincia.
No sabríamos anticipar la actitud que
mostrarán los regidores que han permanecido siempre muy sumisos proclives a sus
intereses personales.
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