Hace dos semanas el ciudadano Alejandro Quiroz Guevara, denunció al SOPNP ALFREDO ABAD MARTINEZ por presuntas fraudulencias al tratar de ocultar una denuncia que él recepcionó.
El recurrente presentó su queja ante los superiores de la policía hace más de un año (12 de abril-017) y aunque Ud. no lo crea, desde aquella fecha hasta hoy, lo tienen en un PELOTEO algo así como de Herodes a Pilatos: que vaya a Cajamarca, de Cajamarca a Chiclayo, de Chiclayo a Jaén otra vez y ahora de Jaén a Lima, etc. como para sacar de las casillas al más consagrado de los cristianos.
Un tanto incómodo por tan detestable burocracia al interior de la policía, el lunes 21 de mayo último, acudió a la oficina del Coronel CARLOS LORENZO GÁLVEZ SCARAFONE, con quien venía coordinando este trámite, el mismo que lo había citado otra vez. Lo hizo acompañado de un testigo el Sr. Enrique Guerra y estando en su despacho abordaron el problema sobre el porqué de tanta demora y tanto embrollo en tramitar esta queja, mostrándole las publicaciones de medios de prensa a las que había recurrido ante tanta mecida. Lo que al parecer, no le agradó al oficial y montó en cólera diciéndole que si va a venir asi, «la próxima te boto de mi oficina».
Sorprendido y decepcionado por el trato grosero y descortés del coronel PNP, acudió otra vez a los medios de prensa para denunciar estos maltratos con el agregado que viajará a Lima para dar cuenta de estos abusos al señor Ministro del Interior y al Director General de la PNP. Manifiesta Quiroz Gue vara que Gálvez Scarafone en una de las 5 a 6 visitas que le hizo a pedido suyo, como pretendiendo suavizar el enredado trámite de la queja contra el policía ABAD MARTÍNEZ, le dijo en voz baja: «Aquí hay mucha corrupción, policías y jueces corruptos». Pero lo que no le dijo es que la oficina en que despacha era de su propiedad, pues otra explicación no habría, al amenazarlo que iba a botarlo «la próxima vez». Teniendo en cuenta que los ambientes de la Comisaría son del ESTADO y deben estar al servicio de la ciudadanía «en ningún momento le he faltado el respeto al señor coronel». Dijo el quejoso. Adelantando que «por la defensa de sus derechos, tendrá que ir no solamente a la oficina del coronel Gálvez, si no a cuantas sea necesario, que no permitirá le conculquen sus derechos coludiéndose las autoridades para proteger a un policía corrupto, que con la demora en tramitar su queja, da la impresión que estaría siendo protegido por sus jefes y que éstos, estarían dándole la mano al empresario que quiere despojarle de su terreno...Es una lástima lo que sucede en nuestra policía; pero no me voy a dejar. Tendré que hacer prevalecer mis derechos». Puntualizó Quiroz Guevara. (ESPACIO CONTRATADO)
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