Al promediar las 2 de la mañana del viernes 20 de junio, un ciudadano
muy conocido, que regresaba a descansar a su vivienda ubicada en pleno centro
de esta ciudad, luego de participar en
una reunión familiar, fue intervenido por dos efectivos policiales que se
desplazaban en una camioneta patrullera PNP, cuya foto de una similar
adjuntamos a la presente.
Lo
interceptaron en el cruce de las calles Diego Palomino y Villanueva Pinillo, a
una cuadra de la sede policilal, lejos de llevarlo a la comisaría, lo subieron
al vehículo, uno de los policías cogió su moto lineal y se lo llevaron por las inmediaciones del parque Grau,
ubicado a más de 12 cuadras, para el correspondiente «arreglo», momentos
después llegó el otro policía con la moto del intervenido al que solamente
pudieron sacarle la suma de TREINTA NUEVOS SOLES (tres billetes de diez), que era todo lo que
tenía.
Lo bajan,
le entregan la moto y lo amenazan para que «desaparezca». Llega a su domicilio,
que se ubica en la 3ª cuadra de la calle Manco Cápac (Centro) y al momento de
abrir su puerta, dos sujetos ya lo esperaban, lo cogote aron, golpeándolo,
derribándolo, le sustrajeron sus pertenencias personales, y se llevaron la moto
lineal marca Honda con menos de un año de haberla adquirido.
Al
concurrir al día siguiente, un policía
mostró el archivo fotográfico, se identificó al presunto asaltante, se habló
con el coronel Julio Cruz Anaya, le dijo
que retorne el lunes 8.00 a.m. para que identifique a los policías, puesto que
solamente dos de esas camionetas salen a patrullar; pero por el horario de su trabajo, no le fue
posible retornar.
Habiendo
quedado todo, en la más absoluta impunidad, como que no fuera suficiente, la
hora y fecha para identificar a los policías que estuvieron de turno aquella
noche.
Señor
Ministro:
Estos
atracos perpetrados por malos policías aquí en Jaén, se producen a diario, por
las quejas y denuncias que se reciben en los medios de prensa, que siendo una
ciudad relativamente pequeña, con un
número limitado de efectivos policiales, resulta bastante cuestionable que los
jefes policiales no se tengan alternativas o intenciones para identificar a
estos malos policías.
Por lo
que, enterados de sus buenas intenciones como nuevo Ministro del Interior, que
todos los peruanos aplaudimos, ponemos de público conocimiento tales hechos,
que se publican EN HONOR A LA VERDAD.
De modo que, no solamente tenemos que cuidarnos de
los asaltantes comunes, también de estos uniformados, que utilizan los
vehículos policiales para sus atracos.
Estamos seguros que esta denuncia pública
llegará a su despacho y seguros también que de inmediato tendremos los
resultados esperados.
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