Muy joven leí la interesante monografía «Breve Visión histórica de Cutervo», del Dr. Salomón Vílchez Murga, publicada el año 1944, libro fundamental para entender los orígenes de los antiguos pobladores que se ubicaron a las sombra del Ilucán. Otro ilustre trabajo que me causó grata impresión, fue la monografía cutervina elaborada por el Dr. Tomás Porfirio Gálvez Quispe, gradualmente fui conociendo nuevos trabajos referidos a Cutervo y relacionándome con sus autores.
Existen pocas fuentes arqueológicas escritas sobre Cutervo, salvo los trabajos del Dr. Salomón Vílchez, del arqueólogo Wester La Torre, Guillermo Figueroa Luna y en el valle del Marañón los enfoques elaborados por el suscrito sobre Arte Rupestre.
Mi experiencia en el Museo, las visitas continuas a diversos asentamientos arqueológicos en la provincia Cutervo, permiten plantear dos concepciones de los pueblos y culturas que vivieron por estas tierras: la que habitó el valle del Ilucán (parte fría), se extendería hasta Llipa y la Lucma por el nororiente; Chiguirip, las Torres y Churucancha por el sur, con pueblos con oleadas propias del Formativo Intermedio y Clásico, así lo demuestran las colecciones privadas y públicas de objetos arqueológicos en la ciudad de Cutervo; de igual forma se aprecia la presencia de una tradición local, Cajamarca, Chimú, Inca, Huambos, Wari.
El valle del Ilucán, según el mito fue inundado por la rebeldía de sus habitantes contra los dioses; los pobladores salvan sus vidas en las cumbres del Ilucán. Calmada la ira de los dioses, la gente empieza a repoblar el valle por el sector Chaquil, luego Yacuchingana, Huangashanga, Raime- En el retorno de la población al valle surge el nombre Cutervo o Cutermuse que significa «volver a poblar». El valle de Cutervo, ancestralmente fue portada principal de Ceja de Selva y acceso de penetración a la Selva Alta; la Ceja de Selva se inicia en las grandes montañas de la Culluna, los pabellones y la Cordillera de Tarros, límite natural entre las culturas serranas relacionadas con la tradición Huacaloma, Layzón y Pacopampa y la Cultura Amazónica o Tropical.
La Cultura Amazónica, tiene rasgos característicos, principalmente en el abundante Arte Rupestre con pictografías tempranas e intermedias en los asentamientos de Visa, Tayales (distrito Santo Tomás), Quilucat (distrito Cujillo). Hasta la creación política de Cutervo como provincia, los distritos: Cujillo, Querocotillo, Choros y Callayuc pertenecieron a la Gobernación de Jaén de Bracamoros, las evidencias arqueológicas de estos pueblos expresan características amazónicas; las pictografías se encuentran en la margen izquierda del río Marañón en la confluencia con río Silaco o Llaucano; en la margen derecha del Marañón existen otros grandes asentamientos de Arte Rupestre, estudiados por los arqueólogos Enrique Bautista Quijano y Quirino Olivera Núñez; estas pictografías poseen características de un Arte Rupestre temprano y propio de la Amazonía.
La unidad geohistórica de de Cutervo, se inicia cuando es creada como provincia, el 22 de octubre de 1910, si bien la ciudad tiene origen colonial, su área de influencia fue solamente hasta la villa de Sócota; las evidencias que detallamos son propios pueblos que habitaron en serranía interrelacionados con otras cultura, siendo Chota el centro cultural en un extremo y la cultura Huambos en otro extremo con los contrafuertes costeños, estos planteamientos no desmerecen a los valles del Ilucán hayan sido asentamientos de grandes culturas que los futuros estudios arqueológicos lo irán develando.
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