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viernes, 14 de junio de 2013

Se olvidaron del «Baguazo»?


  Imposible pasar por alto lo que todos han sentido este 05 de junio, día de triste recordación para los que poblamos esta parte del Perú.
 Pero a la vez de mucho valor histórico cuando hemos presenciado en algunas ocasiones en comunidades nativas que profesores y padres de familia han llevado a los escenarios como dramatizaciónes estos acontecimientos.
  Se esperaba que este año, como los anteriores y mucho más aún debió ser, este CUARTO ANIVERSARIO se conmemore con más ahínco y realismo, debido al pedido de CADENA PERPETUA para los presuntos protagonistas, porque este gobierno está mostrando un comportamiento indolente e inhumano, indiferente e insensible, pese a tener un alto oficial desaparecido, abandonaron su búsqueda y don Ollanta no dice ni pío, como si se tratara de un perro que se pierde o que lo matan.
  De otro lado, dirigentes como los de ORPIAN y sus bases,  en Bagua, AIDESEP con su máximo líder ALBERTO PIZANGO CHOTA, sospechosamente han guardado idéntica indiferencia gubernamental, no les importa nada el peligro que afrontan que sean encarcelados 53 de sus ex dirigentes, tampoco les importa un comino el sufrimiento de los encarcelados actuales AS TERIO PUJUPAT, DANY LOPEZ, FELICIANO CAWA SA y la persecución policíaca que se avecina.
  Pizango Chota, desde su desliz en el intento de sacarle la vuela a los intereses amazónicos pactando un repudiable convenio con una empresa brasilera, luego de recibir una avalancha de censuras, hizo la del MOTELO, escondiendo su cabeza entre la caparazón y desde aquella vez, por vergüenza o por cobardía, no da la cara a sus seguidores que de paso han dejado de creerle y seguirle.
  En vano organizaciones populares y medios de prensa de Bagua, Utcubamba y Jaén que aquel 05 de junio del 2009 estuvieron unidos como un solo puño, defendiendo una noble causa, esta vez fueron  desairados y nadie de aquellos líderes que en esos tiempos se escuda ron en inocentes y aguerridos nativos, se dignó en recordarlos.
   Desgraciadamente esta fue y seguirá siendo la triste realidad de los peruanos de esta parte del país.

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