Sala Mixta
despeja dudas de
falsificación y Ananías iría preso
Como que reorientamos la opinión ciudadana, es necesario no perder de
vista el camino emprendido para recuperar las áreas arrebatadas al pueblo por
la gestión anterior.
Sobre este
asunto escandaloso ya se han dado pasos firmes que apuntan a sancionar a los
verdaderos responsables que se enriquecieron a costa de los terrenos del
pueblo.
Y aunque
el principal protagonista de estos robos Gilmer Fernández ya no está en la
palestra política, muchos lo han perdido
de vista y hasta creen que no existe en
Jaén, totalmente contrario; no estará en el palpitar noticioso diario;
pero tiene sus operadores, con
quienes se reúne permanentemente para chequear lo que se le viene.
Entre esos
operadores, no podría haber otro, tan eficiente, que es de su misma catadura
moral, el regidor Wincler Delgado Monteza, quien le debe todo lo que es y lo que tiene a
su mentor el vacado ex alcalde. Por eso su empeño desesperado en buscar en todo
momento echar excremento con ventilador a esta gestión que notoriamente está
marcando distancia larga de lo que fue la anterior.
Apoyado
con los socios de Ananías y sus asalariados de la prensa, no pierden
oportunidad para levantar llamaradas incendiarias y hacer creer que esta
gestión es igual o peor que la anterior.
Muy justificable
Si se tiene
en cuenta lo que se están rifando o sorteando estos mafiosos.
Conforme
consta, no fue como decía Ananías «me someto a la justicia».
Sus
cochinas conciencias y el pánico a lo que se les viene, ha hecho que empiecen a
poner trabas en la investigación que se les sigue, interponiendo su leguleyo «Habeas
Corpus» en Bagua y en cada sesión de
Concejo, petardazos y pedradas como el juego del matagato para tumbar esta gestión.
Esto se
vio precisamente la noche del miércoles último en la que el regidor Wincler
Delgado vomitó su bilis para pedir a gritos «se forme comisión
investigadora», por el supuesto pago
de 9 mil que ofreció Walter Prieto al CP de Chamaya por materiales para la
construcción del Megaplaza a través de la empresa FLESAN SAC, según lo explicó
«con el sano propósito de evitar conflictos entre Chamaya y la empresa», a cuyo
gerente el alcalde delegado Hilario Vásquez le pidió 30 mil soles, que no fue
admitido y quedaron en 14 mil; pero que cinco mil fueron entregados a los
regidores de ese Centro Poblado, en efectivo, (lo que no dijo el operador W.
Delgado) y esa diferencia (9 mil), se comprometió inicialmente el alcalde jaenés, resarcirle a Chamaya; pero en obras y no en efectivo.
Así de simple. Que no está contemplado dicho
arreglo en la Ordenanza respectiva, conforme lo sostuvieron los regidores en
esa sesión, dicho dinero no se entregó y es más, el trato fue corregido,
mediante resolución de mutuo acuerdo de fecha 12 de junio, poniendo fin a dicho
impase, que rabiosamente fue esgrimido en la sesión referida. El regidor Jaime
Vílchezlo calificó como «negligencia administrativa, por parte de los
funcionarios».
El oculto motivo
Es que, la
Sala Mixta mediante resolución número once, CONFIRMA
la resolución de primera instancia en el sentido que la denuncia que
formuló Ananías contra sus testaferras a las que favorecieron con las áreas
arrebatadas, la Sala Mixta acaba de confirmar la resolución de primera
instancia, en el sentido que dichas personas no incurrieron en falsificación de
firmas y por tanto, queda al descubierto el verdadero autor de las falsificaciones, Gilmer Fernández y con
ello, se abre la primera reja de las otras que le conducirán a «San
Rafael». Por lo que sus berrinches y
temores, tienen aquí su verdadero origen o motivo que dudamos mucho, tengan
escapatoria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario