Desde el martes 10 de abril al promediar las dos de la tarde hasta las 11 a.m. del sábado 14, mantuvo en sus profundidades el caudaloso río Marañón el cadáver de quien en vida fue Nu redine Pérez Portocarrero. Su cuerpo fue hallado en las orillas del remanso de El Muyo (moyuna), casi intacto, con la manga derecha del pantalón rasgada y solo un zapato, muy hinchado por el agua. De inmediato fue trasladado a su pueblo natal Cumba, donde era esperado por amigos y familiares; tras superar el impase que se presentó con el Fiscal de Utcubamba que insistía en ser llevado a la morgue para la autopsia de ley.
Fue introducido en bolsas plásticas y así se le colocó en su ataúd, siendo velado todas esa tarde y noche con la presencia de casi todos sus familiares que llegaron de diversas partes del país. El velatorio se hizo en la casa de sus padres que en vida fueron Sr. Arnulfo Pérez y Julia Portocarrero. Toda la noche fue una especie de VELADA con cánticos, presentaciones artísticas, poemas, intervenciones espontáneas de amigos y familiares del difunto, para ser sepultado el domingo 15, acompañado el cortejo fúnebre por numerosa concurrencia pocas veces vista, hasta su morada final junto a la tumba de sus padres.
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