Mientras Ananías le daba de comer a sus
incondicionales asalariados que le sirven de papel higiénico en un conocido recreo
campestre del sector El Parral, en el
escenario donde se viene ejecutando la pavimentación de la prolongación MICAELA
BASTIDAS POR ADMINISTRACION DIRECTA, se producía otro de los más
grandes escándalos que si no tuviéramos
un MINISTERIO PUBLICO atado con camisa
de fuerza y un poder judicial cautivo, en estos momentos el alcalde y sus principales
colaboradores ya deberían estar encarcelados.
Aquí, dos versiones para que la ciudadanía
deduzca:
La primera: que el estibador de OLANO
de nombre José Bocanegra Bustamante dijo que les hicieron descargar solamente
610 bolsas de cemento en el almacén de la obra, de las 810 y las 200 restantes
en el mismo camión fueron llevadas a uno de los depósitos que tiene el socio y
colega de ANANIAS FERNANDEZ, nada más y nada menos que, don RAMIRO ZELADA TOC
TO, que, según el portal de su EMPRESA RAMIZEL aparece como
dedicado a la venta de terrenos, construcción, transporte, etc. allí fueron
depositadas las 200 bolsas y que «una llamada telefónica de la empresa OLANO,
alertó al alcalde de tal operación sospechosa que comprometía directamente al
almacenero HERNAN VERONA LOPEZ. Que dicho servidor fue intervenido por la
fiscalía y policía y en menos de lo que canta un gallo, sin pasar por las
consabidas comisiones investigadoras MPJ
ni de procesos administrativos, don Ananías lo destituyó del cargo y como para
darle más patetismo a su acto «moralizador», un amplio despliegue publicitario
sensacionalista de su prensa pintó a este servidor como el causante de todos
los robos de material de las obras que ejecuta la MPJ. Y para que el montaje
quede bien, al día siguiente Ananías hacía publicar en grandes titulares como
que el alma cenero HERNAN VERONA «aceptó su delito y pidió perdón» (si recuerdan un poco, son las mismas frases
que se usaron para limpiar las cochinadas del alcalde en la venta de solares,
«reconoció, pidió perdón»).
La
segunda,
es que no contaron con las agallas del aludido presunto delincuente
ex-almacenero metido en tremendo escándalo, quien documentación en mano acudió primero al noticiero PALABRA
VIVA el día jueves y por la noche a
otro noticiero del equipo «PH» (papel
higiénico) del alcalde. Con frases contundentes y enérgicas desmintió
tajantemente: «yo no he reconocido que robé el cemento, a mi no me ha
entrevistado nadie de esos medios de prensa, soy víctima de una cama que me
tendieron desde la GEDUR y del ALMACEN
CENTRAL, señalando con nombre propio al Ing. DELL FERNANDO VERA GUERRERO y a
MANUEL DAVILA MONTENEGRO. Que dicha cama se la tendieron en vista que se
enteraron que les venía haciendo un seguimiento por malos manejos y otros
robos, indicando que éste no era el primero y que el año pasado se «perdieron»
865 bolsas ce cemento. Acusó frontalmente a la EMPRESA OLANO y al mismo ALCALDE
GILMER ANANIAS. Que OLANO ganó la buena
pro para las obras a POR ADMINISTRACION DIRECTA de la MPJ con el argumento que
cobraría después de 45 días, pero que (mostrando documentos) de Tesorería le
pagan a la semana siguiente. Verona se preguntó ¿porqué corrió tan rápido el
alcalde al escenario del supuesto robo llevando periodistas, fiscales y
policía? Acusando a funcionarios del entorno íntimo del alcalde, empezando por
el regidor JORGE AL BUJAR MEOÑO que le alquila a la MPJ sus mezcladoras lo mismo a otros funcionarios que sacan
provecho de las obras. Que pidieron 400 galones de petróleo, computadoras laptop,
200 galones de gasolina, herramientas y de todo eso, no se sabe nada. Enfatizó
el acusado ex-almacenero quien asegura que irá hasta las últimas instancias a
fin de ser escuchado en este lío que
rompe todos los esquemas de lo sospechable.
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