Este es el resumen de las noticias que difundió la prensa internacional: «Queman otras tres iglesias tras su llegada a Chile. Los ataques se produjeron en Cunco, a 700 kilómetros de Santiago» (...martes 16-01-18: fueron OCHO las iglesias que se quemaron en Chile)
El Teólogo J.K. Van Baalen, sostiene en su obra «El Caos de las Sectas». «La religión católica es la más corrupta del mundo; pero la más necesaria». Como para meditar profundamente, más aún, cuando el máximo líder de esa religión, siguiendo la milenaria tradición del apóstol Pedro y su cercano seguidor Pablo, planifican extensas giras por el mundo y no para hacer turismo, si no «para afianzar la fé católica».
Quienes nos ubicamos en el hipotético escenario de ocupar la parte más alta de las tribunas, porque no tenemos recursos para ubicarnos en la platea,en estos viajes del Papa, así como de los otros líderes de las otras iglesias, vemos de cómo la competencia para disputarse el más abultado clientelaje, también está en la religión.
Una evidencia de esta competencia que ya no es tan limpia se aprecia en Chile en uno de sus extremos más nefastos: QUEMA DE TEMPLOS. Desde luego muy condenable; pero inevitable en toda competencia galopante, peor aún cuando no hay árbitros. En versión de algunos amigos de Santiago, nos cuentan que, paralela a las concentraciones de feligreses católicos, se han producido mítines de protesta abierta contra el distinguido visitante y nadie lo ha impedido.
Si recordamos las frases célebres del SAN AGUSTIN: «mira alrededor del mundo y hallarás ciudades sin edificios, sin parques ni jardines; pero ninguna encontrarás que no tenga un dios o un templo» y no es que los chilenos anticatólicos sean ateos, pues la protesta no es contra la religión, si no contra su representante que ven reencarnarse en él, a los BORGIA, por ejemplo, por no mencionar a tantos otros PAPAS que ensuciaron la imagen de esta religión «la más corrupta; pero la más necesaria».
¿Cómo será en Perú esta semana?...
Salvo mejor parecer...
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